Utilizando un campo electromagnético capacitivo o resistivo que se crea mediante los electrodos, permitiendo aplicaciones terapéuticas específicas y fáciles de administrar incluso en las profundidades del tejido.
Este tipo de tratamiento es una combinación de electroterapia y termoterapia que utiliza corrientes de alta frecuencia para la bioestimulación de tejidos con diferente resistencia.

– Capacitiva: se emplea para el tratamiento más superficial, generalmente para patologías musculares.
– Resistiva: actúa sobre los tejidos más profundos como pueden ser tendones, ligamentos, huesos o tejido nervioso.
– Analgesia (disminución del dolor)
– Estimulación de la circulación sanguínea
– Aumenta el metabolismo celular
– Relaja la musculatura
– Ayuda a la correcta cicatrización
– Efecto antiinflamatorio
– Alteraciones musculares
– Patologías circulatorias (drenaje linfático y venoso)
– Alteraciones articulares
– Síndromes neurológicos o patologías de origen nervioso (ciáticas, neuralgias…)
– Patologías de la columna vertebral (cervicalgias, lumbalgias…)
– Lesiones meniscales